El calendario islámico es un calendario lunar utilizado únicamente en las sociedades de fe musulmana, y casi exclusivamente para asuntos relacionados con la religión, festivos y ritos similares.
El año lunar consta de 12 meses lunares y tiene 354 días. Un ciclo lunar dura de media 29,53 días, por lo que un mes lunar puede tener bien 29, bien 30 días. Cada tres años aproximadamente, un año lunar debe tener 355 días para ajustar las fechas al ciclo lunar exacto.
Al ser 11 días más corto que el año solar (de 365 días), los meses lunares se mueven respecto al año civil y los festivos asociados se van trasladando a través de todo el año solar. Tras 33 años vuelven a coincidir con la misma fecha (aproximada) del año civil.
Casi siempre, el uso de este calendario se combina con el empleo del cómputo de la Hégira (con el año 1 correspondiente al año 622 d.C.). Por esto, el calendario se conoce a veces también como «hijrí» (pronunciar hidshrí), aunque el término hace referencia al cálculo de los años transcurridos, no al ciclo lunar en sí.
El año lunar se emplea hoy día en todos los países musulmanes para calcular las fechas de los festivos religiosos y del mes de ayuno (ramadán), pero no constituye en ningún país la base para determinar las fechas de la vida civil, comercial o administrativa: estas se rigen hoy día siempre según el calendario gregoriano, incluso en países donde la religión islámica domina todos los demás aspectos de la vida, como es Arabia Saudí.
Los meses del calendario lunar islámico son 12 y son los siguientes:
Muharram
Safar
Rabi' al-Awwal
Rabi' al-Thani
Yumada al-Wula
Yumada al-Thania
Rayab
Sha'abán
Ramadán
Shawwal
Dhu ul-Qádah
Dhu ul-Híyyah
El calendario islámico es lunar y tiene un año de 354 o 355 días. Cada mes tiene 29 o 30 días, llamados yawm, y los días se agrupan en semanas, llamadas usbû'. El primer día de la semana es el domingo, yawm al-ahad, y el último es el sábado, yawm as-sabt.
El año nuevo islámico ocurre 10 o 11 días antes que el año solar, que tiene 364 días. Cada mes del calendario islámico comienza con la aparición del creciente lunar después de la luna nueva.
Tradicionalmente, el inicio de cada mes se determina por la visión de la primera luna creciente en el horizonte occidental durante el ocaso. Este creciente es normalmente visible dos días después de la Luna Nueva, es decir la fase en la que la Luna no recibe luz alguna. Sin embargo, hoy día la mayoría de los países determinan el inicio del mes por cálculo astronómico como el día después de la luna nueva astronómica.
*Se debe tener presente que estas fechas son estimaciones y podrían cambiar.* *Las fechas pueden variar, en función de los avistamientos locales de la luna, por lo que es aconsejable que lo compruebes con el calendario de tu mezquita local en caso de duda*.